viernes, 25 de enero de 2008

Pelota

Optativa. Todos trabajan, yo ya acabé y aprovecho los minutos que quedan para mantener una conversación -que a mí me resulta interesante- sobre la materia que estamos trabajando y demás.

Noto malas miradas entre mis compañeros -ojo, los hay de otros bachilleratos a los cuales apenas conozco-. Hay alguien que directamente me dice "pelota". Yo estoy interesada en la conversación con el profesor, sus proyectos, sus explicaciones... Y hago caso omiso. Me comenta este profesor que quizá acabe con pocos amigos, pero que serán los mejores que pueda tener; que no haga caso a quien me pueda dañar.

Sonrío. Es tan fácil y reconfortante decirlo pero tan difícil y doloroso aprenderlo... Sabéis que lo conozco de buena tinta. Pero un buen consejo de una buena persona siempre será bien recibido.