viernes, 25 de enero de 2008

Pelota

Optativa. Todos trabajan, yo ya acabé y aprovecho los minutos que quedan para mantener una conversación -que a mí me resulta interesante- sobre la materia que estamos trabajando y demás.

Noto malas miradas entre mis compañeros -ojo, los hay de otros bachilleratos a los cuales apenas conozco-. Hay alguien que directamente me dice "pelota". Yo estoy interesada en la conversación con el profesor, sus proyectos, sus explicaciones... Y hago caso omiso. Me comenta este profesor que quizá acabe con pocos amigos, pero que serán los mejores que pueda tener; que no haga caso a quien me pueda dañar.

Sonrío. Es tan fácil y reconfortante decirlo pero tan difícil y doloroso aprenderlo... Sabéis que lo conozco de buena tinta. Pero un buen consejo de una buena persona siempre será bien recibido.

2 comentarios:

Cris dijo...

Bueno, supongo que a estas alturas de tu vida ya conocerás en famoso refrán " A palabras necias, oídos sordos", ¿no?
Pues eso.

Joselu dijo...

Lo que no se dan cuenta aquellos que te critican es que tú necesitas mantener conversaciones interesantes, que se muevan a un nivel distinto de lo que es habitual entre tus compañeros. Los profesores, cuando son accesibles y predispuestos, pueden añadir un componente de conocimiento y experiencia de la que carecen, lógicamente, ellos. Hablar con quien nos puede aportar algo es fundamental. Yo viví otros tiempos en que las relaciones entre alumnos y profesores eran mucho más cercanas y normales. Actualmente nos hemos distanciado mucho, pero lo que tú experimentas en tus conversaciones, antes era lo habitual. Consejo elemental. Haz lo que consideres pertinente sin que te importe demasiado lo que imaginas que pueden pensar otros. Ellos saben que tú no necesitas ser "pelota" puesto que lo consigues por ti misma. Ánimo y adelante.