miércoles, 23 de enero de 2008

Pequeño gran acto



Iba andando por los pasillos del Metro esta tarde cuando vi justo al lado de la papelera un vaso de Starbucks tirado en el suelo.
Todo el mundo pasaba por al lado como si no lo vieran. No sé si el que lo tiró falló o es que era un poco incívico, pero sin dudarlo me agaché y lo tiré a la papelera.



Una chorradita que me hizo sentir bien.






La adorable perrita yorkshire de la foto de mi perfil es de mi primo. ¿No es adorable? (:

3 comentarios:

Animal de Fondo dijo...

Verdaderamente es una maravilla que podamos entendernos, yo estoy siempre buscando en google algo de lo que escribes, como si fuera extranjero. Hoy he buscado Starbucks pero me esperaba ver una lata como de agua turbulenta y he tenido que releer tu post para ver que era un vaso. Me encanta que sea así y que desde mundos tan lejanos (o que parecen lejanos) nos podamos comunicar.
Oye, estás en talla, como dicen los cubanos (es mi venganza por lo de Starbucks).
Muxu pila.

Cris dijo...

Tiene sentido sentirse feliz después de un acto tan simple, pero a la vez tan cívico y por ello tan importante. Es una felicidad sencilla, cándida, casi infantil por el "haberse portado bien".
Debes sentirte afortunada, no todo el mundo es capaz de ser feliz con tan poquito.

Joselu dijo...

Hoy he tenido guardia de patio en el instituto, y te puedo decir que no está muy extendido eso de sentirse bien por haber depositado un papel o una bolsa de palomitas en la papelera. Es educación cívica que se adquiere o no, en casa, y si se hiciera un informe PISA sobre ello, seguro que saldríamos malparados.